AGENCIAS.- Ya estamos contando los días para que llegue la esperada Navidad y festejar al máximo al lado de nuestros seres queridos, pero una de las preocupaciones que llegan en estas fechas y nos cala más que el frío, es cuánto vamos a pagar por la cena.
Los mexicanos no nos limitamos cuando se trata de celebrar las fechas especiales y no dudamos ni tantito en desembolsar lo que sea necesario para las posadas, los adornos, el árbol de Navidad, los regalos y por supuesto, la comida. ¡Amamos echar la casa por la ventana!
Aunque lo más importante es la convivencia y el amor que le damos a nuestra familia y amigos, pocos podemos imaginar una Navidad sin una buena cena en la mesa, pero ¿cuánto nos va a costar este año?
La empresa Gabinete de Comunicación Estratégica (GCE), realizó un estudio el año pasado, donde descubrió que el 95.1% de las personas entrevistadas preparan la cena en su casa.
Los platillos varían de acuerdo a los gustos y el presupuesto de cada familia, pero lo que casi nunca falta es el pavo, seguido de los tamales, pollo rostizado, barbacoa y pozole, que están desbancando a los tradicionales romeritos y al bacalao (porque #Millennials).
Ante el panorama y para ayudarnos a organizar nuestros gastos, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) realizó un estudio en el que recoge los precios de un menú para seis personas que incluye:
– Espagueti blanco
– Pavo ahumado
– Ensalada de manzana
– Ensalada de Nochebuena
– Uvas
– Bebidas (ponche, refresco, sidra y vino)
La lista de ingredientes para prepararlos consta de 26 productos con precios que van desde los $6.25 hasta los $507 pesos mexicanos, mientras que el costo de las bebidas van de los $17 a los $131 pesos.
En el análisis se descubrió que el costo por platillo realizado y ponche para una familia de seis integrantes es de $547.92, de los cuales corresponden a la ensalada Nochebuena ($90.97 pesos), espagueti ($117.25 pesos), la ensalada de manzana ($208.31 pesos) y el ponche ($131.39 pesos).
Esta cantidad aumenta a $1,360.33 pesos si se incluye refresco, sidra, vino y uvas, lo cual dependerá en gran medida del lugar donde se adquieran los productos. Por ejemplo, en general es más económico comprar los ingredientes en un mercado local y en efectivo, en vez de ir al supermercado y pagar con tarjeta de crédito.
Así que ya sabes qué porcentaje de tu aguinaldo terminará en tu estómago y en el de tus seres queridos, ¡y valdrá cada centavo!