Guanajuato en el “top of mind” para invertir

Japón continúa expandiendo inversiones en Guanajuato

AGENCIAS.- Entre los empresarios y directores de las más importantes empresas en México, el pesimismo por el efecto Donald Trump se ha invertido a optimismo, a pesar del entorno de amenazas e incertidumbre, y ante la elección presidencial en México.

Al menos esta es la opinión del 71% de los más de 900 empresarios y ejecutivos encuestados por KPMG que piensan que la economía de México en este año será igual o incluso mejor que en 2017.

“Creemos que los empresarios han descartado la renegociación del TLCAN y los efectos de las elecciones en México todavía no están reflejados”, dijo el Socio Líder Nacional de Asesoría de KPMG, Roberto Cabrera.

El consenso del mercado es que la economía mexicana crezca más de 2% este año, después de que en 2017, las peores previsiones no se cumplieron, en tanto que el sector externo sigue creciendo y el consumo interno se fortalece como principal motor de la economía. Como reflejo de ello, es un aumento de 11% en la Inversión Extranjera Directa y, apenas en la víspera, la mejora en la perspectiva de la calificación crediticia de la deuda soberana de México a estable por parte de la agencia Moody’s.

ESCENARIO POLÍTICO

Ante la acalorada discusión política y los mensajes de los principales candidatos a la presidencia de México, el 68% de los empresarios y ejecutivos encuestados, no espera que el proceso electoral tenga un impacto en la rentabilidad de su empresa.

Sin embargo, la administración pública federal y estatal mantiene bajos niveles de aprobación, según revela la encuesta Perspectivas de Alta Dirección en México 2018.

Si bien la calificación sobre la actuación del gobierno federal ante el entorno económico pasó de 4% a 16% en la categoría de “buena”, y en la de “pésima” bajó de 30% en 2017 a 18% en este año, 35% considera “pésima” la actuación del Senado y 38% la de la Cámara de Diputados.

Una gran mayoría de los encuestados (82%) considera además que el combate a la corrupción es la principal variable que México requiere para incrementar su competitividad (hace seis años era la segunda variable), seguida de la estabilidad económica (62%) y de mejorar la seguridad pública (60%).

Hacia futuro la mayor reforma que los directivos demandan es la fiscal (61% del 25% que piden reformas estructurales), seguida de la reforma energética y de la financiera, según la encuesta realizada entre diciembre de 2017 y enero de 2018.

AL INTERIOR DE LA EMPRESA

Un cambio radical, aunque tardío, son las estrategias que las empresas encuestadas seguirán para mejorar su competitividad y es que 64% se enfocará a la satisfacción del cliente (alineándose a encuestas internacionales), más de la mitad se enfocará en la innovación y dejando la crisis 48% a reducir costos.

INVERSIONES

El 48% de las organizaciones planea expandir sus operaciones al interior del país, dos puntos porcentuales menos que el año pasado, siendo Querétaro (26%), Nuevo León (25%), y Guanajuato (23%) las entidades en las que se planea invertir, sin que figure alguna de las Zonas Económicas Especiales, que el gobierno ha establecido.