Para poder dimensionar la envergadura que representan nuestros parques y jardines de León, tenemos que establecer como premisa mayor, que estos son en primer lugar, los pulmones de nuestra ciudad, que son el lugar por excelencia donde los leoneses y todos sus visitantes practican deportes al aire libre.
En esta ocasión quiero que nos concentremos en la emblemática “Presa del palote”, la cual traigo a colación de una manera consciente para llamar la atención de ustedes amigos lectores, ¿dónde está la presa? Y seguramente coincidirán conmigo que se la tragó el parque ecológico metropolitano, el cual ha perdido su esencia desde hace mucho tiempo, y perdió su razón de ser para lo que fue construido, que sin duda alguna era la promoción de la cultura, salud y la práctica del deporte como una forma de vida más sana, por medio de la recreación para toda la comunidad leonesa por unas monedas.
Desde mi perspectiva se ha desdeñado por parte del Patronato y el Consejo, la trascendencia social y cultural de un lugar sagrado para los leoneses, y ahora, lo han convertido en un botín, en un filón de oro donde lo que importa es cuanta derrama económica van a dejar los más de un millón doscientos cincuenta mil visitantes al año, que hipotéticamente si todos pagan $12.00 pesos, estaremos hablando de más de 15 millones y a esto habrá que sumarle el pago de estacionamiento de $20.00 por automóvil, es tanto el afán de lucro, que incluso los bonos atléticos que estaban a la venta, ahora, por treinta días se le venden a los usuarios en $720.00, no suelte su calculadora, puesto que aun faltarían las rentas por los convenios que tienen sus directivos por eventos como el festival del globo y algunos otros que omito por cuestión de espacio.
En esta tesitura, creen ustedes que un trabajador, campesino u obrero puede asistir a dicho parque con sus familias? usted tiene la respuesta: se hizo prohibitiva la entrada a las clases más vulnerables, sin embargo, ¿cómo llegamos a esta aberración?
En el invierno de 1993 el Parque Ecológico Metropolitano abarcó la presa del palote dentro de sus trescientas hectáreas, donde fue construido ese lugar de recreación, pero independientemente de la construcción de las pistas para corredores y ciclistas, como lo he dicho, la vista, ha sido el atractivo para todos los practicantes del deporte y así la presa del palote quedó integrada dentro de sus límites, y aquí en este renglón voy a detenerme. A todos aquellos leoneses que nos sentimos orgullosos de ser oriundos de este terruño no se nos olvida que la presa era un lugar en donde todos podíamos asistir sin costo alguno y ahí se podría disfrutar de ricos pescados que los lugareños en sus lanchas sacaban de la presa, asistir a dicho lugar en Semana Santa, por ejemplo, era una verdadera fiesta, como si se estuviera a un lado de una costa, pero estos tiempos quedaron en la historia, ahora, para poder disfrutar de ella, de su paisaje y cercanía hay que pagar un costo, y este es de $ 7 y $12.00 cuando no hay algún evento que puede alcanzar la suma de $50, $60 o $100, dependiendo del evento.
La cuestión de fondo, es preguntarles a ustedes si el Patronato y el Consejo actualmente se encuentran funcionando según las expectativas del pueblo de león y antes de contestar, quisiera traer a la memoria lo que ha declarado el Alcalde Municipal López Santillana cuando inauguró en puerta dorada en el polígono de las Joyas, un parque recreativo, exhortó a los ciudadanos a cuidarlo y respetarlo como si fuera algo suyo. Señaló el Alcalde, entre otras ideas, que lo sintieran propio, que lo cuidaran como si fuera parte de su hogar y me llama poderosamente la atención cuando éste dijo: “ Se busca que nuestras niñas y niños tengan cerca del hogar, un espacio donde puedan convivir, dijo también que el rescate y la dignificación de espacios públicos en la ciudad, está pensado para recuperar la tranquilidad de sus familias, en dicho evento mencionó que dentro de los planes se encuentra la construcción de un parque metropolitano en la plaza de los mariches.
Estas afirmaciones que parecieran plausibles, no se están siguiendo por lo menos en el Parque Ecológico Metropolitano, que incluso hasta el nombre ya perdió, porque ahora solo se llama Parque Metropolitano, y le quitaron lo de ecológico, y yo agregaría que ahora tiene el agregado de SA de CV, es decir, es el de recaudar fondos, hacer negocios, y no el fomento al deporte.
Cabe destacar que dentro de su reglamento el Metropolitano tiene como prioridad la preservación de la flora y fauna nacional, que ésta debe ser una zona recreativa enfocada a la preservación y de ninguna manera a su explotación con un fin de lucro.
Resulta un insulto a la inteligencia de los leoneses, que se diga que el Parque Metropolitano se encuentra dentro de los siete parques más valiosos, según el Congreso Mundial de Parques Urbanos, pero para los leoneses esto es irrelevante y lo que más nos gustaría es que los niños y niñas de León, tuvieran acceso gratuito a este espacio público y que las familias de los trabajadores puedan tener la posibilidad de asistir a una comida departiendo entre sus seres queridos en medio de- ambiente natural que conlleva este centro recreativo. El Parque Metropolitano se creó pensando en aquéllos que no pueden pagar un club social y deportivo, y para aquellos que puedan practicar el deporte que más les gusta en un lugar seguro, aunque no pasa desapercibido que ahí mismo ha habido robos de las pertenencias de los atletas que dejan sus equipos dentro de sus vehículos y de los ciclistas que también asisten y son asaltados.
El señor alcalde ha dicho que no quiere que sus funcionarios caminen a su lado, sino que vayan por delante, pero en definitiva considero que no creo que el Presidente municipal quiera que el dinero sea lo que marque la diferencia entre un niño que haga deporte en esta ciudad y de un niño que por falta de recursos económicos, se vea privado de la posibilidad de hacer deporte.
En suma, no se vale que se pretenda explotar el servicio que prestan los parques públicos, porque no se nos puede obligar a pagar, puesto que para esto existe un presupuesto municipal, para el funcionamiento de estos parques, independientemente que el Parque Ecológico Metropolitano, como debería seguir llamándose, tenga patrimonio propio.
Exhorto y hago un llamamiento a que, si verdaderamente queremos ayudar a nuestra juventud y niñez, debemos trabajar sobre el rescate de una sociedad que ha perdido valores, nos toca a nosotros con urgencia, establecer nuevas estrategias y visualizo como una puerta emergente que el deporte al aire libre y aprovechando sus recursos naturales, lo sea en forma gratuita y sólo así podremos cumplimentar un gran proyecto socio-deportivo.
No hay pretextos para hacer prohibitivo el derecho de todo leonés (niños, niñas, obreros, amas de casa, estudiantes y ciudadanos en general) a tener acceso a un parque público para la recreación, sano esparcimiento y el deporte, el cual se encuentra constitucionalmente consagrado en nuestra Carta Magna, no permitamos que se privaticen nuestros parques públicos y en especial el Parque Metropolitano.
