Duro golpe al sector automotriz si EU sale del TLC

Donald Trump, presidente de los Estados Unidos de Norteamérica

AGENCIAS.- A pocos días de que se celebre la sexta ronda de renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que involucra a Canadá, México y Estados Unidos, los rumores sobre la salida del país que gobierna Donald Trump han aumentado, una acción que afectaría a la economía nacional.

“Es evidente que para México ese rumor ya genera incertidumbre y un impacto en algunas variables financieras y económicas como el tipo de cambio. Ese amago (de EU) es un factor que presiona a través de la volatilidad a la economía mexicana. Si llegara a confirmarse (la salida), México estaría en la necesidad de replantear su modelo económico, su modelo de relación comercial con ese país”, comentó José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC).

Este 10 de enero, la agencia internacional Reuters publicó que Canadá está cada vez más convencido de que Trump anunciará pronto que Estados Unidos intenta retirarse del TLCAN, una medida que podría tomarse casi al mismo tiempo que la sexta ronda, que se realizará del 23 al 28 de enero en Montreal.

A continuación, te presentamos algunas afectaciones que se podrían presentar para México por la salida de Estados Unidos del TLCAN, según analistas.

-Golpe a la industria automotriz

Hay sectores que se verían altamente impactados, entre ellos la industria automotriz, del cual Trump exige que se incremente el contenido regional de 62.5% a 85%, donde el 50% de las autopartes tendrían que fabricarse en ese país.

“Un cambio en las reglas de origen o una potencial salida del país que dirige Trump sí podrá afectar de manera negativa no sólo a la industria automotriz mexicana, sino a las de Canadá y Estados Unidos. El impacto negativo sobre el sector dependerá de los choques en el tipo de cambio y del impuesto a las importaciones de automóviles y de autopartes que se lleguen a determinar. Si el peso se deprecia lo suficiente, pueda ser que las exportaciones automotrices se mantengan”, Siller.

-Impacto en el tipo de cambio

Si Estados Unidos llega a retirarse del acuerdo comercial, la moneda mexicana podría elevarse hasta 22 o 23 pesos por dólar desde las 19.29 unidades en las que se encuentra (cotización del 11 de enero de 2018), aunque hay posibilidades de que se recupere, de acuerdo con estimaciones del IDIC.

“Esto implicaría una transición y adecuación que tendrían que hacer las empresas que producen desde México para exportar a Estados Unidos y Canadá, y viceversa. En el caso de EU y México, afectaría la relación económica, en la parte comercial, que tienen por más de 500,000 millones de dólares, cerca del 45% del producto interno bruto (PIB) mexicano”, comentó de la Cruz.

-Afectación en el crecimiento económico de México y en la inflación

El Banco de México estima un impacto en el peso mexicano y mayores dificultades para reducir la inflación ante la salida del país que administra Trump del acuerdo comercial.

En el reporte Perspectiva Económica Global 2018, el Banco Mundial disminuyó el pronóstico de crecimiento de México de 2.2% a 2.1% para este año, ante las elecciones presidenciales y el TLCAN.

“Para México se podría generar varios años de un crecimiento más bajo de lo que ha mostrado. El país genera el equivalente al 25% de su PIB en exportaciones a Estados Unidos. Una modificación del intercambio entre ambas naciones generaría un crecimiento económico menor”, comentó de la Cruz.

-Reforma fiscal complica el escenario

El escenario empeoraría por la reforma fiscal que firmó Estados Unidos el pasado 22 de diciembre de 2017, ya que podría detener las inversiones de empresas que usan el TLCAN para exportar a Estados Unidos.

“En el corto plazo no se trata de que las empresas se salgan de México, pero sí podrían rehacer su planeación para ver si les conviene estar en el territorio nacional dado la potencial terminación del tratado y de un cambio fiscal en Estados Unidos”, comentó el director de la IDIC.

Dicha reforma tributaria incluye la disminución del impuesto corporativo de 35% a 21%, así como la exención fiscal de 20% para los dueños de negocios sobre sus utilidades y renueva la manera en que se cobran tributos a las multinacionales, al exentar dividendos de subsidiarias extranjeras, a través del Sistema de Exención por Participación sobre Rentas Mundiales.

Las modificaciones que afectarán a la economía mexicana se concentran en el cambio en tasas de impuestos de repatriación de capitales, con la cual se busca que las empresas estadounidenses con operaciones en México envíen sus utilidades a ese país en lugar de reinvertirlas en territorio nacional, advirtió Gabriela Siller, directora de Análisis Económico Financiero de Banco BASE.