Ciudad de México.- “No basta con tener un código de ética que encuadre nuestro trabajo parlamentario, necesitamos romper paradigmas, necesitamos romper con esas inercias de opacidad, conflictos de intereses y falta de integridad de muchos de los legisladores. No podemos seguir así”.
Así fue el tenor de la intervención del doctor Éctor Jaime Ramírez Barba durante la instalación del Comité de Ética de la Cámara de Diputados en la cual, el legislador guanajuatense, participa como subcoordinador Anticorrupción del Grupo Parlamentario de Acción Nacional.
En su discurso, Ramírez Barba se refirió al estudio de opinión realizado por Latinobarómetro 2017 donde evidencia que el Congreso de la Unión es una de las instituciones peor evaluadas por los ciudadanos en términos de confianza.
Dijo que más allá de un código de ética, los integrantes del Poder Legislativo “necesitamos un cambio de rumbo, no podemos seguir como hasta ahora. Necesitamos dar dignidad al parlamento y no solo en lo que se refiere a los recursos públicos, sino en la forma en que nos conducimos en el debate, en la deliberación, en el respeto a nuestros pares”.
Y es que dijo que si en el Congreso federal se procura una reconciliación nacional, se debe profundizar en generar mejores prácticas políticas que son la sustancia del sistema democrático en este país.
Así pues, refirió que la Cámara de Diputados requiere de “reglas claras en materia de transparencia y rendición de cuentas pues, no podemos exigir a otros lo que no podemos exigirnos a nosotros mismos”.
Enfatizó que hoy por hoy, se requiere transitar a un parlamento abierto como el instrumento tangible y medible, que los ciudadanos tendrán para evaluar a sus representantes populares “el parlamento abierto es lo que nos llevará a que se recobre la confianza entre los ciudadanos y sus instituciones”.
Finalmente el diputado Éctor Jaime advirtió que “estoy seguro que el diálogo hará de la Cámara de Diputados un espacio donde las libertades de unos, no lastimen a los de otros; donde podamos discutir con pasión, pero también con respeto”.
